jueves, 30 de agosto de 2007

Robandome las palabras



En ocasiones uno quiere decir algo pero nos enredamos de tal manera que sólo al escuchar a otra persona o leer lo que otros han dicho nos damos cuenta que era eso precisamente lo que queríamos expresar.

Así es que aquí tomo prestadas algunas líneas de uno de mis autores preferidos Stephen King según muchos "el maestro del horror" en la literatura actual... la verdad eso es una calificación demasiado liviana para las cosa que escribe.

Alguno vio la película "Cuenta Conmigo"... adivinen quien escribió la novela...
Bueno de este cuento estoy sacando las siguientes palabras:

"Las cosas más importantes son siempre las más difíciles de contar. Son cosas de las que uno se avergüenza, porque las palabras las degradan. Al formular de manera verbal algo que mentalmente nos parecía ilimitado, lo reducimos todo a tamaño natural. Claro que eso no es todo, ¿verdad? . Todo aquello que consideramos importante está siempre demasiado cerca de nuestros sentimientos y deseos más recónditos, como marcas hacia un tesoro que nuestros enemigos ansiarán robarnos. Y a veces hacemos revelaciones de este tipo y nos encontramos sólo con la mirada extrañada de la gente que no entiende en lo absoluto que hemos contado, ni el por que nos puede parecer tan importante como para que casi se nos quiebre la voz al contarlo"

Con estas palabras que no son mías ( porque yo con suerte tipeo ) justifico lo que escribo.
Las cosas que cuento aquí, en este lugar. y al que le gustan me alegro que sea así. Porque son cosas sinceras, mías y de mi entorno. Si le he regalado una sonrisa a alguien o lo he hecho pensar o reflexionar de verdad me alegro.
Si a nadie le interesa o no le gusta lo que escribo... bien también.

Me despido también con una frase del mismo cuento. Por desgracia una frase demasiado real y verdadera:

"Los amigos entran y salen de nuestras vidas como los ayudantes de los camareros en un restaurante"

Coke

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